Pero la huelga de carácter indefinido que mantienen los obreros por más de casi tres semanas se intensifica día a día también, además de los bloqueos de carreteras, vías ferroviarias y la instalación de barricadas, en las últimas jornadas también se han registrado fuertes enfrentamientos con la policía. 

 

“La huelga indefinida ya es imparable, ya no cabe volver a la normalidad. Nosotros hemos entendido, a pesar de que el gobierno no lo dice así descaradamente, que lo que se está planteando es  el cierre del sector”, aseguran los mineros. 

El cese definitivo de las ayudas al sector estaba previsto para el 2018. Cada año, se reducen paulatinamente un 10%, pero este año el recorte ha sido cinco veces mayor. El gobierno alude a la crisis, pero para los mineros significa renunciar a sus derechos, sería ponerle fin a la minería y a todas las comarcas, ya que la mayoría viven directa o indirectamente del carbón. 

El ministro de Industria y Energía ha anunciado una negociación gubernamental, pero de momento no contempla disminuir los recortes.  
 
Mientras tanto, las manifestaciones se han convertido en un verdadero campo de batalla en el que los obreros en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad lanzado cohetes (voladores) con lanzaderas de fabricación casera.

  

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Fuente: Rusia Today