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Opinión / Actualidad - Economía

Subida de preciosAvalancha de subidas de precios para unas rentas familiares cada vez más bajas. Los hogares tendrán que soportar el encarecimiento de la mayoría de los servicios con las pensiones congeladas y los salarios rebajados o con mínimos crecimientos.

M. J. Alegre / Colpisa

En el año que comienza, ni las administraciones ni las empresas que prestan servicios de carácter general han tenido en cuenta el drastic recorte del poder adquisitivo que están sufriendo los consumidores. Con las pensiones y sueldos de los empleados públicos congelados, y una retribución media por trabajador que ha retrocedido por vez primera en una década; sin el recurso a ayudas sociales como el cheque bebé o el subsidio a los parados que han agotado las prestaciones, las economías domésticas tendrán que apretarse aún más el cinturón para hacer frente a encarecimientos históricos como el de la electricidad, pero también al aumento de precio de los demás suministros energéticos, de los transportes y de las tarifas postales, junto a otros muchos que se están produciendo en el sector privado de la economía.

 

-Un 9,8% ha subido la luz, desde el 1 de enero, para los 17 millones de hogares y miles de pequeñas empresas, en su mayoría comercios, que tienen contratada una potencia superior a 3 kw pero inferior a 10 kw. Por encima de esa potencia mínima, pueden acogerse al bono social y evitar la subida de tarifa las familias con todos sus componentes en paro, las que tienen reconocida la categoría de numerosa o aquellas que perciben pensiones mínimas. En las tres últimas décadas no se había producido un encarecimiento tan elevado y no hay garantías de que en los meses próximos se aprueben nuevos incrementos. El Gobierno ha aprobado una serie de medidas para frenarlos -imposición a las empresas eléctricas de un peaje, recorte de las primas a la generación con renovables- pero hay componentes de la tarifa que no puede controlar. El petróleo es la referencia en el mercado mayorista de electricidad y todo apunta a que el barril de crudo proseguirá su escalada en meses próximos.

Los primeros días de abril, julio y octubre serán otras tantas ocasiones en las que se producirán revisiones de tarifas. En todo caso, y aunque el ministro de Industria ha minimizado el impacto de este primer aumento anual, asegurando que se traducirá en una subida de apenas 3,2 euros al mes, -el coste de tomarse un café para cada miembro de la familia, según su comparación- las asociaciones de consumidores han rechazado este cálculo. La Comisión Nacional de la Energía cifra en poco más de 30 euros el recibo mensual medio de la luz sin descontar los millares de pisos vacíos, ni tampoco los 3 millones de hogares de bajo consumo que podrán disfrutar de la congelación hasta 2013. Su cómputo rebaja el gasto medio real del resto de los clientes, que estas agrupaciones estiman por encima de los 50 euros, y que sufre además los vaivenes de un sistema que permite alternar la facturación tras la revisión efectiva de los contadores con la estimada.

-3,9% se ha encarecido el recibo del gas natural. Los usuarios que tienen contratada una tarifa que no permite el uso de la calefacción se verán penalizados con una subida algo mayor, del orden del 4,14%, y que el proveedor traduce en unos 0,56 euros al mes. Los contratos con tarifa adecuada para la calefacción a gas soportarán un alza del 3,87%, equivalente a 1,66 euros mensuales.

También en este caso podrán darse nuevos aumentos a lo largo del año. Pese a que nada tienen que ver el gas natural y el petróleo, las tarifas toman el crudo como referencia, sin tomar en cuenta que la Agencia Internacional de la Energía ha desaconsejado este procedimiento. El gas natural es cada vez más abundante, pero sus contratos siguen vinculados a la evolución del barril.

-3,13% más, esto es, 13,19 euros de máximo, cuesta la bombona de butano tradicional, la de 12 kilos. Es el precio autorizado, que las compañías trasladan directamente, con el argumento de que los costes rebasan ese importe. Una fórmula automática se aplica para el cálculo de un combustible que todavía utilizan unos ocho millones de hogares, parte de ellos segundas residencias.

-3,9% es la subida media de las tasas aéreas, que las compañías pueden repercutir en los billetes. Pero el aumento no se producirá en todos los aeropuertos, solo en aquellos que han llevado a cabo más inversiones en los últimos años. Aena asegura que en 33 de los 47 aeropuertos, las tasas incluso bajarán.

-13% se ha encarecido el litro de gasolina de 85 octanos a lo largo del pasado año. Ahora está en 1,24 euros de media, un precio cercano a los máximos históricos. En el caso del gasóleo, la subida ha sido del 18% en los últimos doce meses, hasta quedar el litro de diesel en 1,16 euros.

-0,28 puntos se ha incrementado el Euribor a un año -referencia que se utiliza en la inmensa mayoría de las hipotecas- lo que supondrá un aumento de las cuotas mensuales que para un contrato medio -préstamo de 120.000 euros a 25 años y con un diferencial de ocho décimas- estará en 17 euros al mes y algo más de 200 euros en el conjunto del año. Los expertos piensan que, incluso si el Banco Central Europeo mantiene el precio oficial del dinero sin cambios, la situación de los mercados impondrá ligeras subidas a lo largo de 2011. La opinión más generalizada es que el Euribor a un año, que cerró 2010 en el 1,527%, podría situarse en las cercanías del 2%. También constatan que, en las nuevas hipotecas, bancos y cajas están aplicando diferenciales más altos.

-2,94% ha subido el sello de Correos más utilizado, el que permite el envío nacional de cartas y tarjetas postales normalizadas de hasta 20 gramos. Desde el 1 de enero su franqueo cuesta 0,35 euros, un céntimo más que ahora. El sello para las cartas normalizadas de hasta 20 gramos con destino a Europa se ha encarecido el 1,56% (un céntimo de euro) hasta 0,65 euros por envío. La subida para el resto de destinos internacionales es del 2,56 % y la del franqueo certificado oscila entre el 2,43% (envíos a Europa) y el 2,64% (los demás destinos internacionales).

-1,44 % es el incremento medio en el peaje de las autopistas que dependen de la Administración del Estado. 1,16% es el porcentaje de aumento que se ha empezado a aplicar en autopista Estepona- Guadiaro. En las de Aumar, el incremento ha sido del 1,64% y en el tramo San Rafael-Villacastín de la AP-6, las tarifas se han revisado con un alza del 3,25%. Varias radiales de Madrid R-3 y R-5 se han encarecido el 3,43%.

-3,1% han aumentado las tarifas de los trenes de cercanías y de media distancia. Las del AVE y larga distancia presentan un encarecimiento del 2,3% y solo se mantiene el precio del nuevo tren de alta velocidad que une Madrid con Valencia porque ya incorporó en su tarifa el aumento previsto para el nuevo año.

-1,1% se han incrementado, con carácter general, las tasas que han de pagar los ciudadanos por la prestación de servicios públicos. Hay algunas excepciones: mientras se mantienen las que gravan los juegos de azar y el espacio radioeléctrico, la que se aplica por la expedición del pasaporte electrónico pasa a costar 25 euros.

-25 céntimos fue la subida media que experimentó la cajetilla de tabaco a comienzos del pasado diciembre, cuando el Gobierno decidió elevar el impuesto que grava su consumo. Pero las marcas de la gama más baja se encarecieron más, al pasar de 2,90 a 3,53 euros. Las de mayor consume subieron de 3,40 a 3,66 euros y la gama alta pasó de 3,85 a 4,11 euros. El tabaco de picadura aumentó 65 céntimos.

-0,0% en el precio base de la vivienda protegida, que el Gobierno ha decidido congelar en 758 euros por metro cuadrado. Es el tercer año consecutivo que se mantiene sin cambios, a causa de la muy difícil coyuntura que atraviesa el mercado inmobiliario.

-0,0%, es decir, ninguna variación, registra la cuota de abono que cobra Telefónica por la línea fija de teléfono, que se mantiene en 13,97 euros mensuales desde 2009 y así seguirá durante todo este año. Es el único precio minorista que sigue regulado, y la Comisión Nacional de las Telecomunicaciones permite a la operadora aplicar rebajas siempre que las extienda a todo el territorio. Telefónica ofrece en ocasiones algún descuento al «empaquetar» esta cuota con la banda ancha, por ejemplo.