La ruina del ruin Ruiz, que la pague él Imprimir
Opinión / Actualidad - Política
Escrito por Arturo del Villar UCR   
Sábado, 20 de Noviembre de 2010 07:04

Alberto Ruiz Gallardon     Los corruptócratas destrozan al país, y los ciudadanos pagamos las consecuencias. Las declaraciones hechas por el alcalde Madrid y capitoste del partido llamado Popular por sus secuaces, don Alberto Ruiz Gallardón, al salir del palacio de la Moncloa, son dignas de figurar destacadas en una historia universal del cinismo.

   Había acudido a solicitar del jefe del Gobierno de su majestad católica y secretario general del partido llamado Socialista por sus secuaces, el compañero Rodríguez, su autorización para refinanciar la deuda de siete mil millones de euros acumulada por el Ayuntamiento madrileño, y para seguir pagando gastos con cargo a la deuda. Es el motivo del apodo con el que es impopularmente conocido: Ruiz Derrochón. Aunque otros le llaman Ruiz Fascistón.

   Por una vez el compañero Rodríguez actuó con lógica y rechazó su propuesta. El alcalde hizo unas declaraciones a los periodistas que aguardaban su salida del palacio presidencial, en las que dijo sentirse “disgustado, triste y muy decepcionado”. Después añadió que a causa del rechazo los proveedores tardarán más en cobrar sus deudas, muchos trabajadores irán al paro, y se anularán servicios municipales.

   Es decir: los ciudadanos pagamos las consecuencias de la mala gestión del alcalde y su equipo. Ahora los proveedores tardan un mínimo de nueve meses en cobrar sus facturas, por lo cual ellos deben abonar los sueldos a sus empleados de sus propios recursos, y cuando no pueden hacerlo se ven obligados a despedirlos. Ya se ha reducido un cinco por ciento el sueldo de los funcionarios municipales. Se han suprimido servicios públicos necesarios en una ciudad que es capital del reino. Los impuestos y tasas municipales han aumentado, en algunos casos hasta triplicarse. Y todo ello va a ser una nadería en comparación con lo que ocurrirá a partir de ahora.

   Las alcaldadas nos cuestan molestias y disgustos a los ciudadanos, porque Madrid es una inmensa zanja interminable. Hace levantar calles que no necesitan ninguna reparación, con las inevitables molestias para los vecinos y el obligado quebranto de los comercios instalados en la zona. Adquiere el palacio de Telecomunicaciones para transformarlo en sede central del Ayuntamiento, después de una remodelación millonaria, por un capricho megalómano. Dilapida el dinero en actividades inútiles. Incrementa el número de sus asesores personales con excelentes sueldos. Y como la subida de los impuestos y tasas no cubre ese despilfarro, y por una vez el Gobierno ha actuado con lógica para impedir la acumulación de más deuda, el alcalde anuncia cínicamente que los ciudadanos pagaremos la consecuencia de su inconsciencia.

   La Justicia deberá alguna vez juzgar a los corruptócratas, y encerrarlos en la cárcel. No es suficiente decir que se los castigará en las próximas elecciones, porque muchos electores ignoran la verdadera situación de su ciudad. Hay que escarmentar a los enemigos del pueblo, obligándoles a pagar ellos las consecuencias de sus actos.

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Arturo del Villar es  Presidendente de l Colectivo Republicano Tercer Milenio

Última actualización el Sábado, 20 de Noviembre de 2010 07:46