Obreros, armas y Arabia Saudí |
Opinión / Actualidad - Política |
Escrito por Pere Ortega |
Miércoles, 12 de Septiembre de 2018 00:00 |
Los trabajadores de Navantia de la bahía de Cádiz han salido a la calle a manifestarse tras el anuncio de la ministra de Defensa, Margarita Robles, de suspender la venta de 400 bombas de guiado laser a Arabia Saudí, pues veían peligrar el contrato para fabricar cinco corbetas para ese país, tras conocerse el malestar manifestado por el Gobierno saudí. Inmediatamente el alcalde de Cádiz, José María González, conocido como Kichi, y la presidenta de Andalucía Susana Díaz se sumaron en dar soporte a los trabajadores de Navantia.
Tras conocerse las quejas saudíes y de los trabajadores, el gobierno del PSOE ha dado marcha atrás y parece ser acabará suministrando las 400 bombas de un importe de 9,4 millones fabricadas por Expal (Maxam) a Arabia Saudí, para, posiblemente ser arrojadas sobre la población de Yemen. Muy triste y desalentador ver como unos obreros se manifiestan pidiendo fabricar armas, que un alcalde, la presidenta de una Comunidad Autónoma y el Gobierno del Estado, todos autodenominados de izquierdas los apoyen, también que los sindicatos callen. Ante estos hechos, la solidaridad, los derechos humanos, el medio ambiente, la paz son valores que quedan sin contenido, desaparece la ética y el bien común para que prevalezca el egoísmo personal. Y nadie, nadie, presenta alternativas, y haberlas hailas. ¿Los sindicatos de Navantia, el ayuntamiento de Cádiz, el Gobierno de Andalucía y el Gobierno del Estado se han puesto a investigar y diseñar un plan de conversión de esa naviera? ¡No! ¿Se ha buscado la complicidad de colegios profesionales de ingenieros, de asociaciones profesionales y de empresarios para llevar un plan de revitalización de la zona? Parece que no. Pero en cambio, seguro que es posible una reindustrialización y puesta en marcha de nuevos servicios en toda la bahía de Cádiz para limitar el impacto negativo de una conversión industrial de Navantia. Pues ese es el único camino para una empresa, que todos los años pierde dinero. Porque Navantia, empresa pública propiedad del Estado, es una empresa donde su cuenta de resultados siempre ha sido negativa. Además, y en otro orden de cosas, vender armas a Arabia Saudí contraviene la Ley de Comercio de Armas del Estado Español, que señala con toda precisión que no se deben vender armas a países inmersos en conflictos armados; países donde se cometan graves abusos a los derechos humanos; que pongan en peligro la paz regional. Así hasta ocho apartados que impiden las ventas de armas a la monarquía saudí. Sólo en 2017 Arabia Saudí adquirió armas a España por valor de 270,2 M€, 90 millones de las cuales eran en municiones. Es decir, si no se suministran 9,4 millones en bombas sólo se suspendía un 10% de las municiones y un 3,5% del total de las ventas de ese año. Por tanto, ese gesto podía ser una pequeña satisfacción, pero no resolvía el problema ético de fondo, que los trabajadores de Navantia con el apoyo de algunos políticos han puesto encima de la mesa. ¿Para cuándo abordar la cuestión ética de la exportación de armas?
Pere Ortega, Centre Delàs d’Estudis per la Pau ______________ Fuente: Centre Delàs d’Estudis per la Pau |