Muy sencillo. Básicamente porque, como nos hemos cansado de escuchar, el mayor crecimiento económico de España sobre otras potencias del contexto europeo no se traduce en una mejora sustancial de sus principales indicadores económicos en términos comparativos.

Hagamos un pequeño ejercicio. Usted estará de acuerdo en que la mayor velocidad de crecimiento de la economía de España con respecto a Europa es absoluta, es incontestable y seguro que no le cabe ni la más mínima duda. Dejando aparte el hecho de que el mejor dinamismo económico de España pueda provenir del atropello de derechos laborales y de la precarización del mercado laboral, esta supuesta positiva competitividad de la economía española debería dar como para reducir al menos mínimamente el gap del ratio de deuda pública que mantenemos con Europa, ¿no?

Pues ni de coña; tomando como referencia las proyecciones a cinco años del FMI, en 2022 la deuda pública de España será del 94% sobre el PIB (98% en 2017) mientras que en la Zona euro será del 80% (90% en 2017). Por lo tanto, el mayor crecimiento económico de España respecto a la Zona euro no conseguirá que la factura de intereses por deuda pública mengüe en España en mayor medida de lo que menguará en Europa.

Asimismo, el déficit público proyectado también por el FMI se reducirá en mayor medida en la Eurozona que en España. Dentro de cinco años, España habrá reducido su ratio de déficit público sobre el PIB desde el 3,3% hasta el 2,3%, mientras que en la Zona euro lo habrán hecho desde el 1,5% hasta el 0,2%. ¡El mayor ritmo de crecimiento en España no mejora su posición comparativa con Europa! ¡En España existe una ineficiencia grave en la gestión de las cuentas públicas!

Y otro hecho también muy gravemente pasado por alto es el siguiente: ¿de qué nos alegramos cuando nos dicen que hemos recuperado el nivel del PIB previo a la crisis si ahora hay entre dos y tres millones de personas más en el paro? ¿Es porque somos tontos? ¿Qué es lo que los ciudadanos tenemos que celebrar? ¿Que la cuenta de resultados de Telefónica o el BBVA ha conseguido hacer superar al IBEX la barrera de los 12.000 puntos, o que quienes tienen las riendas de las instituciones han sido capaces de generar un superávit, en lugar de un déficit, en las cuentas de la Seguridad Social (actualmente está en déficit histórico)? Pidamos solo una cosa. Basta. Váyanse ya. A Suiza, a Panamá. Dilapiden su fortuna. Pero dejen de expoliar este país ni un minuto más.

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Fuente: El Captor