Lo que une a España y Guinea Ecuatorial Imprimir
Opinión / Actualidad - Política
Escrito por Arturo del Villar / UCR   
Sábado, 12 de Febrero de 2011 06:44

JoséBono   Se lo ha asegurado el presidente del Congreso de los Diputados del reino de España, fray Bono de Nuestra Señora de África, al dictador de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang: "Es muchísimo más lo que nos une que lo que nos separa." Pues claro que sí, como que fray Bono habla siempre inspirado por el Espíritu Santo. Se ha ido en misión a Guinea Ecuatorial, al frente de misioneros variopintos de los partidos presuntamente Socialista, Popular y Convergència i Unió, todos de extrema derecha y de arraigado catolicismo. Veamos algunas uniones:

   El dictador Obiang estudió en la Academia General Militar de Zaragoza, lo mismo que su majestad

 el rey católico de España, por lo que su formación castrense es idéntica, y ya se sabe que la formación castrense imprime carácter.

   El dictador Obiang se proclamó presidente de Guinea tras dar un golpe de Estado militar en 1979, y su majestad el rey católico lo es desde 1975 por designación de un militar golpista.

   El dictador Obiang es el jefe supremo de las Fuerzas Armadas, y su persona es inviolable, irresponsable e incriticable, lo mismo que su majestad el rey católico según el título II de la Constitución aprobada para él en 1978.

   En la dictadura de Guinea Ecuatorial está generalizada la corrupción en todos los niveles de la sociedad, empezando por el político, y el reino de España se halla sumido en una corrupción generalizada, que cada día añade un capítulo más al muy abultado expediente judicial acumulado: hoy mismo ha dimitido el alcalde de Boadilla, por su implicación en el llamado caso Gürtel, y ha declarado ante el juez el arquitecto Calatrava, acusado de lucrarse en el llamado caso Palma Arena, dos noticias que ya no escandalizan a nadie, porque son lo habitual, es decir, lo normal.

   En la dictadura de Guinea Ecuatorial están prohibidos los partidos políticos que discrepan de la legislación dictatorial, y en el reino de España rige una Ley Orgánica 6/2002 de Partidos Políticos, que ilegaliza a los discrepantes con los principios generales del reino, hasta el punto de que en Euskadi son más los partidos políticos prohibidos que los autorizados: hoy mismo ha anunciado el portavoz del Gobierno supuestamente Socialista que ha prohibido la inscripción en el Registro del Ministerio de Interior del último formado, Sortu, porque no le caen bien sus dirigentes.

   En la dictadura de Guinea Ecuatorial los disidentes políticos van a la prisión, y en el reino de España se mete en las cárceles, que están abarrotadas, a los opinantes de ideas disonantes de las oficiales, como puede atestiguar, por ejemplo, Arnaldo Otegi, pese a haber sido absuelto por la Audiencia Nacional el 9 de diciembre de 2010 y por el Tribunal Supremo el 8 de febrero de 2011, porque aún tiene pendientes otros procesos por manifestar su ideología pacíficamente.

   Tiene razón fray Bono: es muchísimo más lo que une al reino de España con la República de Guinea Ecuatorial que con los países de la Unión Europea.