“Para ti Dolores, mujer eterna“, “Desde Kamchatka, ese refugio para resistir”

Por ti las sirenas del sótano salieron de nuevo para buscarte.

Cuando tú vivías en el exilio de luces rojas, mi caja de muñecos de cartón y mis recortables de niña, ya te presentían y te seguían cuando el cine era nuestro refugio en las tardes de frio, y nos ayudabas en aquellos largos días de lluvia interior. En esa magia de sueños, sin saberlo, eras la Tonia que fundía el hielo de la taiga de Boris Pasternak.

Fuiste nuestra Lili Marleen en las brigadas internacionales y el gorrión de Madrid cuando tu voz traspasaba el frente y ayudabas a los soldados a seguir adelante. Y fuiste la Karen revolucionaria que se enfrentaba a una lucha desigual, sin más armas que esa voz y un ejército de mujeres y hombres del pueblo. Luego Neruda, seguro que te soñó e inmortalizó en su verso en la isla de Pascua.

Hoy la pluma se desliza para ti por las teclas del recuerdo, sin presiones, sin prisas, casi sin dolor, y volvemos la vista a esa foto que ya no tiene tiempo. Erguida, siempre de pie, con la cabeza muy alta, y con el cielo sobre tu pelo azul como tu tierra minera, hoy Dolores, quiero pedirte que desde ese país de sueños” El país de nunca jamás”, vuelvas y nos acompañes de nuevo a ese mundo en libertad. Ese refugio en el que nadie podrá robarnos más la esperanza, ese sitio para resistir contigo, Kamchatka, nos espera y desde allí te prometo que esta vez, seguro que “No pasarán”.

Ana de la Fuente pertenece a la Agrupación de Cultura del PC Madrid

Recogido de Mindo Obrero