La Cerollera (Teruel). Homenaje a los luchadores por la libertad Imprimir
Nuestra Memoria - La Guerrilla antifranquista
Escrito por F. Montero / El Periódico de Aragón   
Lunes, 21 de Marzo de 2011 05:15

La Guerrilla en la Cerollera18 de julio de 1947. Integrantes de la Agrupación de Guerrilleros de Levante y Aragón (AGLA) entran en La Cerollera y en el cementerio rinden homenaje a sus compañeros muertos en un asalto de la Guardia Civil a su campamento cuatro meses antes, que se había abierto en los montes de La Cerollera en diciembre de 1946. Izan la bandera republicana en el Ayuntamiento y queman los retratos de Franco y José Antonio.

 

Ese mismo mes de julio, Franco nombra gobernador civil de Teruel a Manuel Pizarro, con el encargo de liquidar al maquis presente en las sierras de esta provincia, Cuenca y Castellón. En menos de un mes actúa. A principios de agosto fuerzas de la Guardia Civil y del ejército ocupan La Cerollera y atacan el campamento del maquis, sede de una escuela de guerrilleros y del estado mayor del AGLA. Atacan con morteros que provocan un incendio forestal que quema más de 350 hectáreas de monte densamente arbolado y hacen huir a los milicianos.

Hoy, un espacio expositivo en La Cerollera recuerda aquellos hechos gracias al programa Amarga Memoria. "No eran bandidos como difundió la propaganda. Eran miembros de un ejército que luchaba por las libertades de la República" señaló durante el homenaje de ayer el director general de Patrimonio, Jaime Vicente.

La exposición permanente ocupa una sala del antiguo horno municipal y contiene unos paneles explicativos, una pantalla táctil para navegar por documentos y fotografías y un documental que recoge testimonios de vecinos de La Cerollera que vivieron este episodio.

En la memoria de los vecinos de este pueblo está todavía presente el incendio del paraje conocido como La Empedrada que destruyó su pinar dentro de la política de tierra quemada emprendida por el general Pizarro en la lucha contra el maquis.

La memoria de estos vecinos, todavía viva, ha estado oculta en las familias durante años. Recuerdos de unos tiempos de miedo en los que se vieron en medio de un enfrentamiento entre guerrilleros y Guardia Civil. Vecinos que se vieron obligados a dejar los lugares donde desarrollaban su vida desde hacía generaciones y siempre bajo sospecha de ayudar a uno u otro contendiente. Buena parte de los vecinos de La Cerollera acudió ayer al horna para ver el montaje expositivo realizado y en el que se recorre de una forma esquemática la guerra civil y la lucha del maquis hasta el final del AGLA en 1952.

Ampliación

La exposición se ampliará en las próximas semanas con la adaptación de una ruta por el monte hasta el campamento guerrillero. Un camino de cierta dificultad, con fuertes pendientes y maleza que ha sido limpiado y en el que se colocará una barandilla de madera para facilitar el recorrido. El camino sigue la senda empleada por los guerrilleros hasta su campamento en el que hoy quedan todavía rastros de aquel incendio. Sus refugios excavados en la tierra y rodeados por piedras cubiertas por ramas que quedaron quemadas y que en un futuro serán excavadas por arqueólogos, según explicó el alcalde, Antonio Arrufat. De este modo podrá ser un atractivo para quienes visiten el pueblo.

La coordinadora del Programa Amarga Memoria, Elisa Plana, explicó a los vecinos que asistieron a la apertura del centro expositivo la importancia que tuvo el campamento de La Cerollera. Destacó que no sólo fue una escuela de guerrilleros sino sede del Estado Mayor del AGLA. Varios combatientes fueron enterrados en secreto en Teruel.

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Fuente: http://www.elperiodicodearagon.com/noticias/noticia.asp?pkid=656148