´Los gobiernos europeos, detrás del Israel del apartheid. Imprimir
Imperio - Palestina, Israel y Mundo árabe
Escrito por Ramón Pedregal Casanova (UCR)   
Viernes, 12 de Octubre de 2018 04:21

“Están las calles llenas de máscaras”. De la novela Flores de plomo. Edit. Galaxia Gutenberg.

Autor el gran escritor Juan Eduardo Zúñiga.

 Cuando un régimen se declara racista, documentando tal afirmación con una “que denomina” Ley Básica del Estado Nación”, con fecha 19 de julio de 2018, ¿qué hay que hacer?.

En el Estado Nación judío, el Pueblo Palestino, el que vive por origen en Palestina, según los sionazis ha dejado ya de tener derechos, de pertenecer al país del que son: palabra de Netanyahu, que a su vez había asegurado en 2014 que cumpliría.

En la reunión de los neocolonialistas, de los arrogantes racistas que guerrean para ocupar Palestina, aprobaron la ley suprema 62 de los 119 asistentes. Quienes se opusieron a semejante oprobio, ofensa a la humanidad, fueron 55, y 2 más se abstuvieron. La aprobación conlleva dejar escrito que tanto la Ribera Occidental de Palestina ocupada, los territorios del West Bank en los que han construido o levantan otros asentamientos (crímenes de guerra según las leyes internacionales), así como Jerusalén, capital de Palestina, son de su entera propiedad y conforman el estado de la raza y religión judíos.

Nadie puede negar que lo que ahora han escrito los sionazis es la realización de la idea con la que partían a finales del siglo XIX, y, que hoy, han dado actualidad escrita, reflotando así el proyecto nazi.

Hacer una ley de leyes con la que determinar-justificar la persecución de quienes ostentasen raza, religión, oposición política diferentes, nos da la pista para saber de antemano lo que va a suceder. Las persecuciones en base a tales consideraciones tienen por objeto impedirla relación de igualdad.

Si los nazis impusieron la guerra contra todos los que no se les sometían, los sionazis han instaurado en su legalidad la guerra a los Derechos Humanos en todos los niveles, han definido la ocupación de Palestina como un derecho suyo divino, que está por encima de toda ley acordada a nivel mundial para el entendimiento.

Su ley, creada a partir de una creencia religiosa nos retrotrae a tiempos en los que los mantenedores de la mitología eran reyes y sacerdotes, gobernantes, y eso se sitúa en tiempos en los que la razón, la luz de la conciencia y del conocimiento no había entrado en la sociedad. Los dueños del poder eran puramente bárbaros. ¿Hay alguna expresión política más atrasada, más contraria a Derecho, más destructora de la igualdad jurídica, política, económica, que la que conforma el pensamiento sionazi?.

¿Qué respuesta han dado los gobernantes europeos?: el embajador de la UE, Emanuele Giaufret, hizo la declaración siguiente sobre la ley sionazi: “huele a racismo … discrimina a grupos, especialmente a los árabes”. ¿Les parece suficiente?. La respuesta del régimen israelí ha sido inmediata, no había terminado su frase el representante de la UE cuando aquellos le llamaron para protestar enérgicamente y mandarle callar, y así ha sido, no ha habido ni un sólo gesto más. Si se mira con detenimiento a los gobernantes europeos se ve que se cubren con máscaras.

Nadie puso freno a las ambiciones nazis y nadie pone freno a las ambiciones de sus continuadores israel-eeuu. Tomando el primer puesto de importancia la religión y la raza, junto a su bravata de “pueblo elegido de Dios”, deberíamos saber el camino que preparan, o nos preparan, a la clase trabajadora empezando por la de Palestina.

Esos que desde Europa se callan, porque el régimen israelí les ha mandado callar, saben que Palestina es el campo de pruebas, es el primer lugar, por eso en las recién creadas Naciones Unidas se reservaron los antiguos y nuevos imperios más de la mitad del territorio de Palestina entregándolo a la entidad creada para la ocasión de nombre Israel. El propósito, se ha visto, era volver a Oriente Medio antes o después, para volver a hacerse con las riquezas naturales que en su momento les habían hecho entrar en el desarrollo industrial, y conseguir el nuevo dominio colonial.

La Ley Básica del Estado Nación del régimen israelí es el paso que no quieren atender, no quieren hacer frente al avance sionazi, se encubren tras ellos. Comercian con el régimen, colaboran policialmente, le entregan armas, le hacen la propaganda, callan ante cada crimen, … como vemos la UE prefiere seguir en los negocios, pues desde el primer día la creación de Israel con el dinero de Rothschild, ese es el dios que los ha elegido, fue y es un negocio. La Ley Básico del Estado Nación judío es el intento de retroceso en siglos en que fracasaron los nazis, y quienes les suceden ahora lo instauran contra Palestina. Pero no se olvide nadie, con el racismo y el derecho divino de los elegidos por Dios y el silencio y la colaboración del capital europeo se perseguirá, se empieza a perseguir, o a preparar la persecución en todas las latitudes, a las clases más humildes, empezando por el Pueblo Palestino. No se olvide nadie.

 

Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: “Gaza 51 días”, “Palestina. Crónicas de vida y Resistencia”, “Dietario de Crisis”, “Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero”, y “Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios”. Presidente de la Asociación Europea de Cooperación Internacional y Estudios Sociales AMANE. Miembro de la Comisión Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos.