Después de lo que acaba de suceder en el programa Esenciales Ana Rosa (T-5) tomándole declaración a Isabel García -esposa de Santiago del Valle- en una delirante parodia, mezcla de Sala de Justicia y Comisaría de Policía, solo cabe un camino: cerrar los tribunales, clausurar las salas y audiencias de justicia, jubilar a todos los jueces, y que el Estado de Derecho quede en manos, exclusivamente, de Ana Rosa Quintana instituida en jueza única de este país. ¡Ah! la sesión que han confeccionado ha sido tan macabra como surrealista.

En vista de que la mañana del viernes estaba sucediendo en la Audiencia de Huelva la última sesión del juicio sobre el asesinato de la niña Mariluz, la imparable señora Quintana decidió apretar el acelerador. Necesitaba generar -antes de que acabase el juicio- un suceso, un golpe, una excitación, y se proyectó sobre esa criatura que viene siendo objeto de morbosa delectación en su programa desde hace días: la desnortada y enfermiza esposa de Santiago del Valle, Isabel García. Fue sometida inmediatamente a un interrogatorio en toda regla. El experto Nacho Abad fue el encargado de ir recalentando a la criatura. Le decía, restallante, apocalíptico: «¡Mentirosa! ¡Su marido la va a abandonar porque a él le gustan las niñas jóvenes! ¡La va abandonar! ¡Diga la verdad! ¡Cuente la verdad, que a lo mejor se librará de la cárcel!». Y la mujer, ya completamente histérica, llorando y a gritos, exclamó finalmente: «¡Síííí, mi marido se la cargó!». ¡Ah! qué inmensa satisfacción, camuflada de congoja, le entró entonces a Ana Rosa instituida en jueza suprema del asunto, Y Nacho Abad gritaba: «¡Ahora acaba de decir toda la verdad! ¡Una compañera nuestra intenta comunicar al presidente de la Sala lo que Isabel ha confesado aquí, en directoooo!». O sea, quizá hasta pretendían parar el juicio. Y naturalmente toda Tele 5 se ha transformado -en La Noria por ejemplo, ayer mismo, o en los propios informativos de la cadena- en colosal caja de resonancia del momento judicial-televisivo conseguido. Como muy bien advirtió ayer en este diario Julia Camacho en su excelente crónica sobre el juicio de verdad, el de la Audiencia de Huelva: «Lo que ha contado en la tele Isabel García ya lo había confesado en el primer interrogatorio que le practicó la policía». Efectivamente. Pero aquí está visto que lo único que cuenta es que lo diga delante de la jueza suprema Ana Rosa y su tremendo fiscal adjunto, al grito de ¡Otra exclusiva Tele 5!

------------------

Fuente:

http://www.elperiodico.com/es/noticias/tele/20110227/jueza-ana-rosa-dicta-sentencia/899294.shtml